Salmos 91:3
“Él te librará del lazo del cazador, De la peste destructora.”
La palabra cazador es la que el diablo útiliza, como cuando los cazadores de aves o animales colocan trampas escondidas para que su presa caiga en ellas; eso es lo que el diablo trata de hacer con nosotros, pone tentaciones, distracciones para que caigamos en ellas.
Pero el Señor dice que si habitamos bajo su protección Él quita esas trampas de nuestras vidas.
El diablo no tiene nada bueno para ofrecer, por eso es que Cristo murió en la Cruz. En éste capítulo, verso a verso dice las cosas que Dios hace para que podamos vivir la vida en victoria.
Dios conoce al enemigo y sus trampas por eso puso la ley de la victoria de nuestro lado.
El Señor hoy nos dice que no hay trampas para sus hijos porque Cristo las destruyó en el calvario.
Cualquier cosa que sea de muerte, Dios la quita y pone a sus hijos bajo su abrigo para que no entren en peligro.
El diablo quiere que todo el mundo muera, pero Dios dice que no, que los hijos de Dios habitan bajo su abrigo y manda ángeles para protegernos por la gracia de Dios.
Tenemos paz y seguridad en el nombre de Jesucristo de Nazaret.
Amén.