Salmos 91:9
“Porque has puesto a Jehová, que es mi esperanza, Al Altísimo por tu habitación,”
Nuestra casa es nuestra casa, es donde nos aportamos normalmente, donde descansamos el alma y lo más importante de tu casa es tu habitación donde tú descansas en Dios y con Dios.
Lo que tú haces por el día Dios está ahí, en Tu habitación y tu habitación es cuando entregas tu corazón, donde se lo damos a Dios y no un setenta,
ochenta, ni siquiera un noventa y nueve por ciento si no más del doscientos por ciento, si tú lo haces vas a descansar y vas a tener la bendición en esa habitación, donde Dios quiere cambiarnos, en el nombre de Jesús.
Amén.