Romanos 14:2
“Porque uno cree que se ha de comer de todo; otro, que es débil, come legumbres.”
Esto explica que hay uno que tiene fe y otro que no tiene fe.
Es un punto donde tenemos que crecer en Cristo y reconocer que Él lo hizo todo posible.
Muchas veces crecemos en la iglesia y estamos bien pero empezamos a juzgar diciendo: este hace esto, ese no hace nada no es tiempo para juzgar porque muchas personas van a venir a la iglesia que son del mundo y no entienden lo que es bueno o correcto, tenemos que recibirlos como en un hospital, porque ningún doctor o una enfermera puede decir:
“tú no estás enfermo para venir a este hospital, para qué viniste?”
Ellos no hacen eso, ellos los reciben, los cuidan y los ponen donde tienen que estar para que se sanen.
Así es en la casa de Dios, hay muchos que vienen y hacen cosas que no tienen que hacer y eso no debe ser.
Dios va a hacer la obra en cada vida, los va a arreglar, los va a transformar, los va a sanar y los va a llenar con el espíritu Santo para que puedan entender lo que es bueno y lo que no es bueno para el Señor y van a saber lo que a Dios no le gusta.
Deja que Dios haga la obra usándonos a nosotros con amor, en el nombre de Jesús, porque el amor de Dios nunca falla.
Como los doctores saben que la medicina no va a fallar porque los va a sanar, así es Dios Él nos va a sanar.
En el nombre del Señor.
Amén.