Salmo 105: 39 (AMP): El Señor extendió una nube por cubierta [durante el día], y un fuego para alumbrar en la noche. [Éxodo. 13:21.]
Jesús está siempre presente. A nosotros, como seres humanos, nos resulta difícil creer y vivir la realidad de que Jesús siempre está con nosotros en todo momento. Durante el día, cuando las cosas están bien o en paz, no hay demasiados conflictos, y por la noche, cuando la vida no es exactamente hermosa, Jesús está allí. Las distracciones pueden hacernos olvidar que Dios está ahí. Su estandarte sobre nosotros es el amor. En la oscuridad, cuando las cosas se ponen un poco difíciles, Él es el fuego que nos alumbra y consume todo lo que intente hacerte daño. De día o de noche, Dios siempre está con nosotros. Él te ama. Su protección y su guía están ahí para siempre.