Mateo 5:6 RV
[6] Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.
Bienaventurados los que saben lo que es correcto, íntegro, puro, justo y quieren que triunfe. Dios está buscando un pueblo que no se deje llevar por los sucesos populares o de moda, sino que haga lo correcto ante Dios. Para vivir y respirar por lo que es verdad y no mentiras, tiene que haber verdadera hambre interior. No se guíe por lo que oye o lee, sino por la palabra de Dios. Él nunca cambia, vacila ni abandona, sino que cumple su promesa.